Tecnología mexicana reduce riesgos y accidentes en explotación minera
En los últimos 17 años la reducción de accidentes en la industria minera mexicana ha sido drástica gracias a la adopción de nuevas tecnologías desarrolladas en el país. Mientras en el año 2001 la Cámara Minera de México (Camimex) informó que la tasa de incidencia anual de accidentes, leves y graves, fue de 8.2 por cada 100 trabajadores, cada 365 días, en su informe 2017 reportó que la tasa se redujo a 2.01 accidentes anuales por cada 100 trabajadores. Con estas cifras, las minas se ubicaron debajo del promedio de accidentes de toda la industria mexicana, que se ubica en 2.17 anual.
Para este avance en seguridad, influyó la adopción de nuevas tecnologías pirotécnicas o de explosivos, como los fragmentadores de roca controlados, los detonadores y cerillos electrónicos, que reducen el riesgo de la principal causa de accidentes en el sector minero: la caída de roca y los derrumbes. En el proceso de conversión hacia una industria minera mucho más segura han influido mucho los desarrollos tecnológicos cien por ciento mexicanos, patentados y exportados.
La minería es la sexta fuente de divisas para México. En 2016, las exportaciones de 32 metales y minerales que componen la llamada Canasta del Sector minero, sumaron el año pasado 15 mil 681 millones de dólares. Además, la minería mexicana es fuente de empleo de 354 mil personas, lo que explica las altas preocupaciones en materia de seguridad.
De acuerdo con la Secretaría de Economía y su organismo especializado en atraer inversión extranjera y promover exportaciones nacionales, ProMéxico, en el año 2016 se estima que el sector minero mexicano alcanzó un valor superior a 15 mil millones de dólares. Sus principales productos son Oro (25%), Plata (24%), Cobre (18%), Zinc (6%), Arena (3%), Fierro (3%), Grava (2%), entre otros.
Fuente: Crónica