Los taxis aéreos, eléctricos y sin piloto están listos para despegar masivamente en menos de diez años
Pequeños aviones eléctricos piloteados por la inteligencia artificial se cruzan por encima de las ciudades para llevar a sus pasajeros de un “vertiport” (aeropuerto vertical) a otro: ese es el escenario de ciencia ficción que Silicon Valley promete en diez años.
“Vamos a ver aparecer esta red de taxis aéreos eléctricos, regionales o de larga distancia. El paisaje va a cambiar mucho”, asegura Marc Piette, fundador belga de Xwing, una empresa especializada en tecnologías autónomas para la aviación.
Varias empresas californianas preparan activamente este futuro de la movilidad, que esperan pueda ser un remedio al tráfico y la contaminación.
En un hangar de Concord, en la bahía de San Francisco, Xwing se concentra en el factor más sorprendente de la ecuación: que cualquier avión o aeroplano despegue y aterrice en forma vertical (VTOL), y que con motor a gasolina o eléctrico, pueda rodar, despegar, volar y aterrizar por su cuenta.
Y al mismo tiempo hablar con los pasajeros.
“Sistema de pilotaje automático encendido”, declara una voz de mujer cuando Ryan Olson se sienta al frente de la nave, en un viaje en el que no tocará el tablero ni el joystick, como lo hace un instructor con un aprendiz.
“El avión es un buen alumno, a diferencia de los humanos que se comportan de manera diferente cada vez”, comenta el piloto.
Equipado con cámaras, servidores, radares y otros instrumentos, el Cessna Caravan ya es autónomo con buen clima y Xwing trabaja para que también sea capaz de enfrentar el mal tiempo.
Fuente: El Economista