Geolocalización: beneficios potenciales en materia de marketing
La aceleración exponencial que la pandemia provocó en las ventas por e-commerce y en la incorporación de la tecnología a favor del conocimiento y servicio al cliente, ha provocado una mayor necesidad de apoyarse en herramientas tecnológicas para diferenciarse y generar una ventaja competitiva para los negocios que venden directo al consumidor.
Vender por internet ya no es suficiente. La omnicanalidad ya suena como un término trillado y viejo. Integrar el punto de venta físico con el e-commerce ya casi se da por hecho. Entonces, ¿qué alternativas quedan disponibles para ganar la batalla por la decisión de compra de los consumidores hacia nuestros productos?
Una alternativa para lograr esto es la “geolocalización”, que puede ser usada en diferentes formas para potenciar la competitividad de nuestra oferta de valor.
Quiero comentar cinco posibles alternativas de uso de esta tecnología para apoyar la venta de nuestros productos, maximizando el entendimiento y nuestra relación de compra con los consumidores en este regreso a la normalidad:
1. Conoce tu amiba. Tradicionalmente se conoce en lenguaje de retail a la amiba como la zona de influencia de una tienda, la cual representa el universo más inmediato y con posibilidad de cubrir más rápida y eficientemente. Delimitar y conocer el área de influencia de una tienda te dará la posibilidad de entender el target de consumidor potencial, su demografía, su perfil y posiblemente el tipo de necesidades que tiene.
Por otro lado, te permitirá enfocar mejor tus esfuerzos de marketing, acotando a la zona en cuestión y evitando el derrame de esfuerzos en zonas donde no tengas presencia e influencia.
2. Apodérate de la última milla. La batalla por diferenciarse en términos de servicio en la venta por e-commerce cada vez se concentra más no en los precios y productos sino en el nivel de servicio al cliente. Entregar eficientemente en el menor tiempo posible hará la diferencia a los ojos de los consumidores. Las plataformas digitales cada vez tendrán más la necesidad de aliarse con especialistas en logística, los cuales resuelvan de mejor manera los obstáculos para reducir los tiempos de entrega.
No necesitamos grandes compañías logísticas con cobertura nacional, sino pequeños y enfocados especialistas que dominen y se apropien de ciertas zonas donde el negocio sea interesante.
3. Optimiza tu forma de vender. Hoy en día llegar a los puntos de venta no es suficiente. La magnitud y la complejidad de los canales de venta como el tradicional o el de conveniencia demanda la incorporación de tecnología para maximizar las rutas y minimizar el costo de entrega.
Este tipo de sistemas nos permite planear las rutas de entrega o de nuestros vendedores para hacer más con menos y asegurar la disponibilidad de los productos de alta rotación en los puntos de venta clave.
4. Entiende el “viaje”. Podemos entender mejor los hábitos de nuestros clientes en la zona de influencia que cubrimos a través de mapear su comportamiento con herramientas de geolocalización que nos permitan entender y analizar la ocasión de consumo, identificando hábitos y necesidades cubiertas en conjunto para aprovecharlas.
Podemos identificar mejores sitios para la apertura de nuestras tiendas o aprovechar en nuestro favor hábitos de traslado o actividades afines para maximizar o aprovechar el tráfico a las mismas.
5. Atrápame si puedes. Diversas herramientas para comunicarnos con nuestros clientes a través de su celular dentro de las mismas sucursales pueden utilizarse para comunicar las bondades de nuestros productos, realizar promociones o cruzar esfuerzos digitales. Esto ya es una realidad en otros países y México está listo para aprovechar este tipo de tecnología.
La pandemia nos ha impulsado a pensar fuera de la caja y recurrir a estrategias y herramientas de marketing innovadoras que incorporen la tecnología a nuestra forma de localizar, entender y comunicarnos con nuestros clientes para obtener mejores resultados.
No es opcional ignorarlo ya o pensar que no lo necesitamos. Necesitamos estar dispuestos a probar, iterar y aprender los beneficios potenciales que tendrá la geolocalización en nuestros esfuerzos de marketing y en nuestros resultados de negocio.
Fuente: Expansión